Manantial de luz

Tus piernas son un río

el súbito desdén del frío cauce de una ingrávida prisa que palpita

pez fuera del agua

bocanadas de luz refulgiendo frente a mis ojos

tus piernas resplandecen cauda de cometa

tus piernas abismo

caída libre

paracaídas

umbral de viento y tormenta, manantial que me inunda:

granizas

hasta el naufragio de mi quilla medular

hasta sumergir la cara, asumir la punta de la lengua en el terso higo de rocío ácido y bermejo

palpitar el frío vacío entre los pliegues acedos de la piel tejida por estambres íntimos

sacudir el aire que borbolla de vértigo y relampaguea los tejidos estremecidos en los andenes de los huesos

olear el velo de la lengua con la cadencia de serpiente al acecho arremolinando las tarascadas y mordiscos de la avidez

replegar el clamoroso fulgor de la sed

sumergir de nuevo el bamboleo inasible de la silueta del fuego

cuyo destello se contonea por tu espalda, para luego:

verte estallar tu canción  de luces sopranas

ver estrepitarte la cabellera

y subir por la ola del grito a la cumbre de la ola que te deja lacia y contraída

Imágenes: 1) sin nombre, Aliver Kevern 2)  Lassitude, Toulousse Lautrec; 3) Como un ángel, Steven Hanks 3) El sueño de la esposa del pescador, Hokusai